Andrés Calamaro en Paraguay: el encanto del bohemio

Si toda tu vida estuviste en un freezer y te descongelaron anoche para ir al show de anoche, lo único que tenías que saber sobre Andrelo es que se lo respeta y es un grande. Te guste o no lo que diga o haga fuera o dentro del escenario. Bajo ese contexto uno aprecia más a este artista de lentes oscuros, prácticamente una leyenda viviente del rock en español.

En su cuarta visita a nuestro país, el Salmón convoca a todos al predio del Yacht & Golf Club en Lambaré para presentar un repertorio que satisface la mayor cantidad de gustos posibles, combinando clásicos de su cosecha solista y con Los Rodríguez, los nuevos temas de su recién estrenado Bohemio y homenajes más que justos y necesarios. El combo incluía un cantante con dominio absoluto del espectáculo y una banda soporte bien afilada para la ocasión.

A las 22 hs. puntual empieza el show, Calamaro se acomoda frente a su teclado y “Mi Enfermedad”. Ya desde ese momento se notaba que el complejo del Yacht le quedo chico. Los asistentes estuvieron perfectos, lo vienen estudiando desde hace años así que no era de sorprender, eso sí, siempre emociona ver un público así de entregado.

Casi cuatro décadas de himnos para las masas lo respaldan y el se lo toma con una calma hasta casi zen, tomándose mates y contando anécdotas para amenizar la velada. La excusa de su vuelta a Paraguay fue la presentación de su nuevo disco y por lo tanto se cantó unas cuantas de allí con la aprobación de la Luna y los presentes que acompañaron en todas sin excepción.

El paseo por la vasta carrera de este artista proseguía con “Tuyo Siempre”, “Loco” y hasta daba lugar para la festiva “Tres Marías”, el primer pico alto de emotividad plena se daba en el final de “Carnaval de Brasil” donde enganchó con el célebre “Walk on the Wide Side” del gran genio que se nos fue hace poco, Lou Reed.

Entre tema y tema aprovechaba para hacerse querer un poco más, hablando del porro de alta calidad que se produce acá, pidiendo un vitoreo por otro gigante del rock argentino, Charly García (“¡Charly cuidese! ¡Charly cuidese!”) que está pasando por un mal momento de salud y tampoco fue indiferente ante las protestas del pueblo que está indignado por sus senadores de turno. Acarició a todos donde más les gusta y continuaba la avalancha de éxitos como “Estadio Azteca” y “Sin Documentos”.

La backing band era consciente que la totalidad de los aplausos y ovaciones de la noche irían para una sola persona pero eso no fue para nada un motivo de achique, cada uno tuvo su momento de lucirse, especialmente en la sección instrumental a lo Miles Davis que Andrés aprovechó para presentarlos uno por uno. Paso un rato para que aparezca la conocidísima “Flaca” y de corrido la canción más coreable de la noche, “Paloma”, tema emblemático para los fans más acérrimos. Con eso iban a los vestuarios con ventaja de 6 a 0.

Para el bis se vino la mejor parte. El rock and roll bien al palo con “Alta Suciedad” y el solo final de uno de sus guitarristas para la posteridad, culminando el show a cánticos de hinchada en “Los Chicos” que incluyó un homenaje en la pantalla principal a algunos ídolos argentinos que ya no están como Spinetta, Gardel y el Negro Olmedo, entre tantos otros.

De postre se vino una breve versión de “Música Ligera” con la aclamación intermitente que emocionó a Calamaro hasta las lágrimas, llegando a besar la bandera patria y el piso del escenario. En esta tierra lo aman y eso no lo va a olvidar jamás.

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1 pensamiento sobre “Andrés Calamaro en Paraguay: el encanto del bohemio

  1. Tuve el privilegio de asistir a los 4 Recitales de aNDRES ,y este fue sin dudas el mejor.Notable por donde se lo mire,esa voz la mantiene a pesar del paso del tiempo.Musico por excelencia.

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