Jauría dio un gran primer show ante «los perros» en Asunción

Era el regreso, hace como 10 años que el señor Ciro Pertusi no pisaba Asunción, lejos quedaban los días gloriosos con Attaque 77, y la pregunta era «lo va a lograr con Jauría?», la respuesta no tardó en llegar, si, con un enérgico show de más de dos horas prácticamente «echaron abajo» Kilkenny y pusieron a poguear hasta al dueño. Te contamos como lo vivimos:

Pasados unos minutos de la medianoche subían al escenario, pequeño pero bien montado de Kilkenny, no había vallado (cosa que terminó siendo quizás un problema) pero eso también significó que el concierto fue muy cercano al público, tal vez demasiado dado que se desató el caos en varias partes del show. Ataviados con las máscaras de Perros, Ciro, Ray, Sebastián y Mauro arrancaban con la marcha imperial de Star Wars enganchado a «Guerra de las galaxias», aqui, el setlist de la noche (que tuvo un par más al culminar la lista)

«Hace rato no venía a Paraguay, rememoraba Pertusi, unos diez años quizás? preguntó al público… y bueno chicos, ustedes tienen la suerte de decir que estuvieron el día que Ciro Pertusi volvió a Paraguay» completaba diciendo, ante la euforia de los fans.

Durante la semana, Ciro nos adelantaba en una entrevista que tocarían varios clásicos de su ex banda, que la lideró por 22 años, Attaque 77, y bueno, al cuarto tema se vino el aluvión, con Western, que lo vimos asi:

A mitad del tema ya se fueron los dos primeros «echados» del concierto, y si, era jodido mantener la compostura y tras irrumpir en el escenario, estos tuvieron que seguir el show desde la vereda, primero se nos cruzó por la cabeza que los guardias estaban siendo muy duros, pero al final les dimos la razón, esa primera reacción determinó que el resto del público se comporte (ni tanto) el resto del recital, que iba subiendo la adrenalina de los presentes.

Jauría tuvo en frente a un público muy prendido al show, que acompañaron cantando los temas, incluso los más nuevos, frente a las sonrisas de Pertusi que asentía con la cabeza el descontrol que ocurría en frente suyo.

Al promediar la hora de show, otro aluvión, el clásico «Beatle», de Attaque, seguido de quizás uno de los temas más festejados de Jauría, «Indios Kilmes» para continuar con otro back en el tiempo con «Perfección», aquel cover tan bien hecho de la banda brasileña «Legiao Urbana», que marcó otro de los puntos altos de la noche.

Siguieron canciones como «Amigo mio», del disco «Libre o Muerto», «Chicos y Perros», de Attaque también, y «Morgue corazón» del disco «Jauría». Y lo que debía ser el clásico «encore» o irse y volver, terminó siendo un breve «quieren más?», claro, a donde iban a ir si los tenían a los perros cantando y pogueando a solo centímetros.

Como «Gilda» disfrazado en el setlist, se vino «No me arrepiento de este amor», que antecedió a «El puente más allá de lo vivido», dedicado a Gustavo Cerati.

Iba terminando la noche, pero quedaban sorpresas, como «Espadas y serpientes» de 1990, y el supuesto cierre con «Jauría»

«Terminó la lista» anunciaba Pertusi, pero la gente ni atinó a moverse, entonces hizo caso a un pedido hecho por una fan que gritaba casi pegada al escenario, sonaba entonces «La gente que habla sola» del disco Antihumano del 2003 (Attaque 77) y luego el esperado y coreado «Donde las águilas se atreven» que era pedido por todo Kilkenny desde la mitad del show. Cabe destacar un detalle no menor, hasta uno de los dueños de Kilkenny, Coto Nogués su sumó al pogo en los últimos temas, demostrando que el poder de Jauría es enorme y contagioso en vivo.

Asi cerró la primera noche de Jauría frente a «los perros» de Asunción, cargado de canciones para los nostálgicos de la carrera de Pertusi (me incluyo) y de las nuevas composiciones que también fueron muy bien recibidas, esperamos que no pasen de nuevo 10 años para volver a ver a este grande del punk rock sudamericano en nuestro país.

Fotos: Orly Chaparro. Crónica. Roque Silvero